Cuando nos referimos a traspasar un negocio nos referimos a ceder a otro la actividad de ese negocio. Lo que se traspasa es la cartera de clientes, el equipamiento de maquinaria, herramientas y otros útiles, el mobiliario, la marca o imagen del negocio. A este se le suele llamar el fondo de comercio. En un negocio familiar y para entendernos lo que se traspasa es el medio de vida que te va a dar ingresos que te permitan vivir.
Cuando hablamos del traspaso de un local nos referimos al traspaso a otro de un contrato del alquiler en el cual está referido el local comercial objeto del traspaso.
En los tiempos que existían contrato de arrendamiento de renta antigua, tenía su lógica, si el local era bueno, estaba bien situado y pagaba poca renta, pues se pedía de traspaso el diferencial a precio de mercado de unos cuantos años. Así tanto el que cede el local como el que toma el local hacen buen negocio, eso sí a costa del pobre dueño del local. Personalmente siempre me pareció una ley injusta que desequilibraba el comportamiento natural del mercado. Pues estos tenían sin haber hecho nada para merecerlo unas condiciones muy favorables en sus alquileres y me alegró ver como alguno paso de tener local de primera casi gratis a tener que pagar varios miles por un local de segunda.